lunes, 13 de junio de 2011

EL RABO MUEVE AL PERRO

El hombre controla su propia vida. La Biblia dice que Dios le ha dado “dominio sobre todas las cosas”, lo cual es cierto cuando el hombre comprende la Verdad; y la Verdad es que sus condiciones exteriores – su ambiente - son la expresión de su mentalidad y nada más. No son la causa, son el efecto. No vienen primero, sino que siguen. Uno puede cambiar sus pensamientos y sus sentimientos, y entonces las cosas exteriores cambiarán para concordar, sin duda, no hay otra manera de funcionar. Usted no es feliz porque se sienta bien. Usted se siente bien porque es feliz. Usted no tiene fe porque las cosas marchan bien. Las cosas marchan bien porque usted tiene fe. Usted no está deprimida porque se le haya presentado un problema, sino que el problema se le ha presentado porque usted antes ha perdido su comprensión de la verdad. 

El secreto de la Vida, pues, consiste en controlar sus estados mentales, si usted lo consigue, todo lo demás vendrá. Aceptar la enfermedad , los problemas y el fracaso como males ineludibles, y quizás inevitables, es tonto, porque es esa misma aceptación la que mantiene la existencia de esos males. El hombre no está limitado por su entorno. El hombre crea su entorno mediante sus creencias y sus sentimientos. Suponer otra cosa es como pensar que el rabo puede mover al perro. 

Si ha estado pensando que las condiciones exteriores son más fuertes que usted, y que esas condiciones pueden impedirle que se manifieste como era la intención de Dios, dígase a usted mismo: “ La cola mueve al perro, e inmediatamente revertirá esa creencia. 

Dios quiere que usted sea sano, feliz, y libre, y usted no puede aceptar nada menos. Pida que Dios actúe en su interior – y créalo – y nada lo hará retroceder. ¿ Quién le impidió que usted no obedeciera el mandato de la Verdad? 

¿LEÓN O BURRO?

El gran enemigo de la humanidad es el miedo. Mientras menos miedo tenga, más salud y armonía tendrás. Mientras más miedo tenga, más problemas , de un tipo o de otro, aparecerán en su vida. El único problema real de la humanidad se reduce a librarse del miedo. Cuando uno no le teme en absoluto a una situación, esa situación no le puede afectar. Claro, hay que recordar que el miedo existe a menudo en el subconsciente, sin que uno necesariamente advierta su presencia. La mejor prueba de que uno se ha librado del miedo ante una cuestión particular es una sensación de alegría y felicidad ante esta cuestión. 

Lo que hay que recordar, sobre todo, es que el miedo es un engaño . Llámelo engaño y desaparece. 

Hace varios años ocurrió un incidente curioso en Holanda. Un león se escapó de un circo ambulante. No muy lejos, una ama de casa cosía en la sala de su vivienda, cerca de una ventana abierta. Súbitamente, el animal saltó al interior, pasó junto a la mujer como un relámpago irrumpió en el comedor y se refugió en la alacena triangular bajo la escalera. La asombrada mujer creyó que se trataba de un burro. Indignada por las huellas de lodo que había dejado el animal en el limpio suelo, lo persiguió hasta el armario, donde se hallaba entre escobas y cacerolas, y lo golpeó sin piedad con una escoba El animal temblaba de terror, y la enfurecida mujer redoblaba la fuerza de sus escobazos. 

Entonces llegaron cuatro hombres, con armas y redes, y capturaron a la bestia. El aterrorizado león no opuso resistencia, estaba feliz de haber escapado a la amenazadora dama. 

Cuando la buena mujer descubrió que se había enfrentado a un león, se desmayó y estuvo enferma durante varios días. 

Esta historia ilustra perfectamente el desmoralizador poder del miedo. El ama de casa dominó por completo al león mientras creyó que era un asno, y mientras lo trató como un asno, el león creyó que era muy poderosa y le tuvo un miedo terrible. Cuando la mujer descubrió su error, la vieja creencia de la humanidad en el miedo regresó y aun cuando se hallaba perfectamente a salvo, reaccionó de acuerdo con la tradición de la raza. 

Deseche el miedo. Concentre su energía en esa meta, y otros problemas se resolverán por sí solos. 

El tratamiento contra el miedo consiste en comprender ( en hacerla real para uno mismo) la Presencia de Dios en uno y Su inmutable amor. 

El que teme no es perfecto en el Amor. 

MENDIGO, COBRA ESE CHEQUE

En su interior hay una fuente inagotable de poder, si puede entrar en contacto con ella. Ese poder lo puede curar, y lo puede inspirar al decirle qué hacer y cómo hacerlo . Lo puede sacar del territorio de Egipto y llevarlo a la Tierra Prometida, donde fluyen la leche y la miel. Le puede dar paz mental y sobre todo, otorgarle el conocimiento directo de Dios. 

Ese es el Poder de la Oración Científica. 

No hay problemas que la oración no pueda vencer, ni nada bueno que no pueda llevar a su vida. 

Ese es el mensaje de toda la Biblia. Lo resumió Jesús cuando dijo: “El Reino de Dios está dentro de Ti” . El hombre tarda en comprender ese mensaje, y se pasa la vida en una búsqueda ansiosa de las cosas exteriores, mientras pierde lo que realmente importa. Es como un granjero arruinado que no sabe que en su campo , bajo tierra hay una mina de oro. El granjero escribe, llama frenéticamente a los bancos en busca de crédito. Pide ayuda a familiares y prestamistas, y entretanto, la mina de oro se encuentra bajo su terreno, intocable, insospechada. 

Esta verdad queda dramáticamente ilustrada por un incidente que ocurrió en la vida real, hace varios años. El cadáver de un vagabundo, cubierto de harapos, se encontró cerca de un horno de cal, a donde evidentemente se había arrastrado en busca de calor. Después de la autopsia, cuando se cortaron sus ropas para echarlas al incinerador, apareció, cosido al forro de los pantalones, un cheque por una fuerte suma. Indudablemente, el dueño original del traje lo había cosido en su interior como medida de precaución, y por alguna razón desconocida lo había olvidado. 

¡ Considere la situación! Ese pobre vagabundo se había sentado muchas veces a tomar un café frío y comer un mendrugo, probablemente feliz por haber conseguido unas migajas y todo el tiempo se sentaba sobre miles de dólares, sin saberlo. De haber advertido la riqueza que poseía, habría dormido bajo techo esa noche fatal, en vez de a la intemperie, y habría salvado su vida. Tal vez habría comenzado de nuevo con ese capital y le habría ido bien. 

La mayoría de la gente, en algún sentido, es como el vagabundo, porque muchas personas sienten alguna carencia en sus vidas. Quizás tengan mucho dinero, sin embargo, pueden ser pordioseros de salud, de felicidad, o de vivencia espiritual. 

La riqueza no se convierte en abundancia hasta que no se invierte. Un talento está muerto hasta que no se explota. Cobre su cheque en el Banco del Cielo y póngalo a producir en su vida. 

Fíjese bien, éste es el momento correcto; fíjese bien , éste es el día de la salvación.